En Fuerteventura la razón principal del movimiento y atracción turística es definitivamente el SURF, un deporte que nació hace años y que con el tiempo se ha arraigado y se ha hecho famoso un poco en todas partes.
¿Te gustaría surfear pero eres un principiante o un novato? Definitivamente deberías ponerte en manos de un buen instructor.
Los instructores de las escuelas son los que conocen las mejores playas donde se puede practicar este deporte, ellos saben el tipo de playa que mejor se adapta a tu nivel.
Visto desde fuera, la primera impresión que tiene casi todo el mundo es que es «fácil». Atención, ningún deporte es tan fácil, especialmente si hablamos de deportes acuáticos. El mar es el que al final decide y manda, debes tener el mayor respeto.
Hay muchos hechos a tener en cuenta: las condiciones diarias del mar, la marea, que es muy importante, por lo que las escuelas deciden diariamente el horario de las distintas clases, teniendo en cuenta todos estos factores.
Ser un buen surfista no significa ser un buen instructor, hay diferencia. Un buen instructor es el que te enseña, y que también llega a transmitirte su pasión y su amor por este deporte (que también es un estilo de vida). Lo sientes enseguida si quien lo enseña lo hace con pasión o sólo de forma mecánica… ¡sólo para!
El instructor además de darte la base correcta (que luego te s que continuar), te sigue paso a paso para permitirte comprender mejor los diversos aspectos de este deporte y sabe cómo entender las diferentes necesidades de cada estudiante, no todos somos iguales.
El surf es un poco como ir en coche, hay precedentes que deben ser respetados, una vez más hablamos de respeto pero esta vez hacia otros surfistas.
Un buen instructor entra en el agua con sus estudiantes, para enseñarles y no para surfear!!!!